jueves, 27 de septiembre de 2012

FUCVAM ( Uruguay) Medalla de oro.

FUCVAM, MEDALLA DE ORO. Publicado en el Diario La República. ( 20/9/12) En la primera semana de septiembre dos delegados de FUCVAM (Federación Uruguaya de Cooperativas de Vivienda por Ayuda Mutua), viajaron hasta la ciudad de Nápoles ( Italia), a los efectos de recibir el primer premio de “Mejores Prácticas Mundiales en vivienda y hábitat”, para lo cual fue seleccionada por el jurado de Hábitat Naciones Unidas (UNHABITAT) entre más de doscientas experiencias de varios países del mundo. Afortunadamente, al participar de este evento, tuve el placer de estar allí, cuando a los compañeros les entregaron el premio. Y vinieron muchos recuerdos a mi mente, muchos agradecimientos, sí porque este más que merecido reconocimiento internacional hacia FUCVAM, se lo otorgan no solamente por ser una alternativa popular de excelentes resultados sino además por haber sido capaces de trasladarlo solidariamente a varios países del mundo, donde hoy ya germinó esta semilla de matriz uruguaya. El cooperativismo de vivienda por ayuda mutua nació a fines de la década del ‘60 cuando en el país se debatía la creación del Fondo Nacional de Vivienda y la gestación de la ley 13728. Aquellos jóvenes técnicos del Centro Cooperativista Uruguayo y los trabajadores organizados tanto territorial como sindicalmente hicieron nacer a esta FUCVAM que hoy ya cumplió sus 42 años. Y recordé los cientos de movilizaciones, la represión vivida en varias ocasiones y momentos históricos de la vida de nuestro Movimiento. El desconocimiento de más de un gobierno de nuestro país también vino a mi memoria y llegaron las imágenes de la histórica recolección de firmas del 26 de febrero de 1984 contra la ley con la cual la dictadura pretendía pasarnos a propiedad individual, o las decenas de marchas a pie por las carreteras de nuestro país. Sin duda recordé a cada uno de los 169 compañeros y compañeras que fuimos detenidos por querer ir a Punta del Este, denunciando la desaparición de los 100 millones de dólares del Fondo de Vivienda, bajo el gobierno de Batlle. Y recordaré también a cada uno de los ocupantes de tierras del año ‘89, donde reclamábamos un lugar donde construir, así como los cientos de asambleas compartidas en debates fraternos que definían la estrategia a seguir y reivindicaré una vez más la huelga de pago, que asumimos concientemente contra los “colgamentos” que nos querían cobrar entonces. El Foro Urbano Mundial donde participaron 10.000 delegados del mundo, en su ceremonia de clausura le otorgará el premio a FUCVAM, ¡vaya medalla de oro!!!. Porque no fue nada en vano, de todos los 42 años de lucha y consecuencia que tantas y tantos compañeros le dieron a esta organización, la más importante síntesis política desarrollada por la clase trabajadora uruguaya en el campo de la vivienda y del hábitat. En este premio estarán representados los miles de “ciudadanos ilustres anónimos”, los miles de hombres y mujeres sin “monumentos”, los miles que nunca figuran en la nomenclatura de nuestras ciudades. También serán representadas las decenas de delegados brigadistas internacionales que FUCVAM ha desplegado desde hace años por varios países de nuestro Continente. Del mismo modo lo serán las miles de familias hermanas de otros países que creyeron que se podía concretar en sus realidades nacionales el Cooperativismo de vivienda autogestionario, de ayuda mutua y de propiedad colectiva. Esta “medalla de oro”, no será transmitida en directo por los grandes medios de comunicación, no se podrá ver en horas escolares en las aulas de nuestras escuelas y liceos, a pesar de constituir un evento que reconoce en el camino de la solidaridad, que por momentos parece tan ausente en nuestra sociedad, un itinerario no sólo humanamente relevante sino también social y económicamente factible para la concreción de un derecho humano esencial como es la vivienda. Lo lamentamos honestamente, pues siendo sistemáticamente inundados por informativos que viven pasando noticias de asaltos o lamentables muertes, sería de un impacto positivo para nuestros jóvenes el saber que la sociedad en que viven y sus organizaciones sociales pueden realizar transferencias de conocimientos generados en ellas. En Nápoles este pasado 6 de septiembre miles de familias de Cooperativistas de vivienda, fueron justicieramente galardonados. Pero no seríamos tampoco justos en esta nota si no hiciéramos expreso el reconocimiento a las y los compañeros que ya no están junto a nosotros físicamente y que fueron los primeros en soñar con este emprendimiento que hoy se ha expandido por todo el continente. Y del mismo modo, a los cooperativistas suecos que creyeron en la posibilidad de apoyar y facilitar una cooperación concebida como transferencia sur-sur. Esta sí creemos es otra globalización, verdaderamente internacionalista. Gustavo González ( Analista) desde Nápoles.

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