Sin afectar el presupuesto nacional, no se resuelve la vivienda

Querer resolver el problema de la vivienda sin que exista dentro del presupuesto de cada país una partida claramente establecida para la vivienda, es realmente imposible.
Por otra parte concebir que la afectación del presupuesto en el tema vivienda, se trata solo de construir materialmente casas, también es un error.
Cuando un país invierte en vivienda, está invirtiendo también en salud, en trabajo y en educación.
Y digo invertir, no digo gastar, hoy en el Continente existen muchos llamados gobiernos progresistas, sin embargo la inversión en los mismos de vivienda por parte del Estado sigue siendo muy baja, no dista en general de lo poco que invertían los gobiernos neoliberales y de la forma en que estos invertían que es lo peor.
Estamos en el Continente, más urbanizado del mundo y esto no va a detenerse, por el contrario se va a acrecentar, lo que hace al problema mucho mayor, por tanto se trata de no darle vueltas sin sentido a la cuestión de la vivienda.
Es imprescindible que exista verdadera voluntad política, y que ella se vea reflejada en los presupuestos nacionales. Lo que pueda o no hacer un gobierno, es lo que marque su presupuesto, lo demás es un buen saludo a la bandera nada más.