jueves, 15 de mayo de 2014
El Salvador situación social .
VIOLENCIA EN EL SALVADOR. ( Publicado en El Diario La República Uruguay 13/5/14).
Estamos hablando de uno de los países que tiene los mayores índices de violencia ciudadana, pero el tema se agudizó mucho más a partir del mes de marzo y en particular inmediato al triunfo electoral del FMLN.
Estamos hablando que llegan a registrarse entre 15 o 16 asesinatos diarios en los meses de marzo y abril. Pero además existen métodos cada vez más atroces, al grado que han sido ametrallados los buses públicos y la guerra entre las llamadas maras o pandillas recrudece a diario.
Vivir en San Salvador implica un riesgo permanente, donde las pandillas se han apoderado totalmente del control de la ciudad, el reparto de zonas de influencia, hacen que la gente y sobre todo los jóvenes Salvadoreños, no pueda ir de un barrio a otro sin ser interceptados por los pandilleros, quienes les obligan a no entrar en un barrio si ese joven vive en otra zona.
Ello debido a que cada pandilla, manda y ordena en un barrio controlando todos los movimientos del mismo.
Las extorsiones son permanentes, todos los negocios por pequeños, medianos o grandes que sean deben de pagar “la renta mensual” y de no hacerlo, el negocio puede ser incendiado o su propietario asesinado.
Imaginará el lector lo que implica vivir en estas condiciones.
Increíblemente esto está siendo aprovechado por la derecha política culpabilizando al gobierno del problema de las maras.
La Iglesia Católica al igual que una serie de pastores evangélicos hacen conferencias de prensa y llaman a la pacificación del país, la embajadora de los EE UU también opina a diario, en definitiva todos hablan, proponen, pero la solución no aparece.
Los debates entre la población se polarizan, algunos piden la pena de muerte, otros una tregua con las pandillas, otros dicen que debemos de volver a que la Biblia sea obligatoria en las escuelas, en fin, existen de las opiniones más variadas.
El Salvador vive al igual que otras ciudades de nuestro Continente éste problema y no es de fácil solución. Se han experimentado en este país ya en más de una oportunidad la llamada “mano dura”, lejos de resolver el problema, lo agudizó.
La segregación espacial, la exclusión social, la falta de perspectivas para la juventud, las condiciones de pobreza que se vive en los países centroamericanos, son el caldo de cultivo del problema. Allí está el problema, años de exclusión social, con altos porcentajes en pobreza o pobreza extrema, no se resuelva de un día para el otro. La utilización política de un flagelo social de este carácter por parte de la derecha es realmente atroz. No dudo de que pueda estar planteado un plan de desestabilización agudizando este tema, para culpabilizar de esta forma al gobierno. Gustavo González ( Analista)
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